Había
una vez unas ninfas las cuales vivían en un río, eran tres hadas que
destacaban por sus cualidades. Rosetta que era
la hada de las flores y el bosque, Breena, la hada de la tierra y Nerida
la hada del mar, éstas tenían una Reina que era Tianna. Ésta al
ser la reina tiene la capacidad de tener todas las cualidades de
estas hadas, Tianna a pesar de ser la reina de las hadas es la más
desafortunada ya que ellas se aprovechan de su jefa continuamente
haciendo que la reina fuera la que hiciera el trabajo por ellas.
Las hadas siempre se
estaban inventando excusas para no hacer su trabajo, Rosetta solía
decir que le dolía la cabeza cuando tenía que hacer que la
primavera fuera llegando, Breena decía que tenía fiebre cuando
tenían que empezar a salir las raíces de los árboles y Nerida
solía inventarse que le dolía la barriga cuando tenía que hacer
que hubiera mareas enormes.
La pobre reina, siempre
tenía que verse obligada a hacer dichos trabajos ya que consideraba
que si se encontraban mal no lo conseguirían hacer del todo bien y
que a ella no le importaba hacerlo. Éstas llegó un momento en el
que incluso se cachondeaban de la pobre reina ya que llegaban a
pedirle que hiciera que calmara el viento porque se habían roto una
uña, mientras que esto lo podían hacer las tres.
Un día la reina Tianna
se puso mala con gripe y por lo tanto no podía realizar su trabajo
hasta que no se encontrara bien, al ocurrir esto mandaron una
sustituta de la reina desde El Consejo de Hadas, la reina que acudió
durante el tiempo que ésta se encontraba mal se llamaba Iridessa,
éstas pensaban que mientras que Tianna estuviera mala ellas iban a
poder seguir actuando sin hacer absolutamente nada de sus funciones
como hadas, ya que la hada reina que viniera iba a permitir que no
hicieran nada si se encontraban mal, pero por mala suerte para ellas,
Iridessa no permitía esto y cuando estas se inventaban que se
encontraban mal ella rápidamente se daba cuenta de que estaban
mintiendo y les decía que se dejaran de bromas que la función de
las hadas era trabajar y que eran esenciales para poder hacer que la
naturaleza se pudiera llevar a cabo.
Una vez que éstas
tuvieron que empezar a trabajar para la reina Iridessa, ella les
mandaba tareas bastante complicadas además de las que ellas debían
hacer, al éstas tres hadas llevar tantísimo tiempo sin hacer nada
ya que todo se lo hacía Tianna había olvidado como se realizaba su
trabajo y estaban comenzando a perder sus poderes, por lo tanto, nada
de lo que intentaban hacer ocurría tal como debía de ocurrir. Las
mareas llegaban a convertirse en enormes tsunamis, los árboles
comenzaron a caerse porque sus raíces se estaban pudriendo y las
flores y las hierbas comenzaron a secarse.
La sustituta de la reina,
Iridessa, comenzó a enfadarse y a actuar como una loca,
considerándolas a las tres unas flojas y egoístas, empezóa
preguntarles el por qué de no saber como hacer bien su trabajo,
éstas reconocieron que se aprovechaban de la bondad de la reina
Tianna, al Iridessa darse cuenta de lo aprovechadas que éstas
estaban siendo decidió imponerles un castigo basado en servirles a
ella y a la reina Tianna todo lo que éstas pidieran además de hacer
su trabajo.
Tras éste castigo que
duró más de tres primaveras éstas se dieron cuenta de que no
podían seguir actuando así y les sirvió como lección, por lo
tanto, fueron conscientes de que la vida no se basa tan sólo en
nuestro propio bienestar, si no que también está basado en el
pensar por los demás y sólo pedir al resto favores cuando de verdad
se necesiten no por el simple hecho de no tener ganas. Esto hizo que
a partir de este momento ellas hicieran siempre su trabajo, de la
mejor manera posible y sobre todo sin aprovecharse de nadie.